Aromas serios, notas de frutas blancas, provenientes del hollejo de la uva, con cuarzos, dan como resultado un bouquet discreto y elegante. En boca es más expresivo y rico pero bien equilibrado por una excelente acidez y una larga longitud. Es un vino con un excelente potencial de guarda.

Elegante, lleno de energía, este vino combina una riqueza de sabores con una frescura increíble. Ciertamente sería un vino del que Tim Berqvist estaría orgulloso. Este vino fue nombrado en honor a Tim Berqvist, una figura icónica de la región de Duero, instrumental en el relanzamiento de Quinta de la Rosa en 1988.